Alimentación

El hámster es un animal omnívoro, es decir, que come cualquier tipo de alimento.  La dieta principal de los hamsters se basa en granos y semillas, algunos frutos secos como las nueces.

 

Puede comer casi toda clase de verduras, tan solo algunas limitaciones. Pueden comer zanahoria, nabo, pepino, brócoli, o muy poca cantidad de lechuga (ya que tiene mucha agua). Hay que prepararlas en crudo o cocidas sin ningún tipo de condimento. El maíz también suele ser uno de los alimentos preferidos.

 

 

 

 

 

La dieta debe ser complementada con frutas no ácidas, como pera, manzana, melocotón, uva, o cereza, entre otras. También se les puede dar huevo cocido sin sal, o unos trocitos de pechuga de pollo cocido también sin sal, lo que les aporta proteínas. 

 

Hay que llevar cuidado de no abusar de las semillas y frutos secos demasiado grasos, como pipas de girasol. Pueden comer almendra, avellana, nuez o cacahuete, pero en cantidades pequeñas.

 

 

 

 

 

 

No debe faltar agua limpia, cambiada a ser posible todos los días, a través de un bebedero adecuado para roedores.

 

A los hamsters les encanta almacenar comida, por lo que utilizan unas bolsas que tienen en las mejillas, llamadas abazones, para guardar la comida que encuentran y llevársela hasta su nido, donde la almacenan para comérsela más tarde. Es su costumbre que los alimentos estén almacenados debajo de su propio lecho o junto a éste, con la finalidad de poder comer entre las largas horas de sueño.